DESAPRENDER PARA APRENDER
“Los analfabetos del siglo XXI no serán aquellos que no sepan leer y escribir, sino aquellos que no puedan aprender, desaprender y reaprender.”
Alvin Toffler
El principio de la creatividad es la experimentación, es buscar vías para entender y hacer las cosas de forma diferente, es plantearse preguntas nuevas y buscar sus múltiples respuestas. Y ¿Qué otra cosa es la educación? Muchas personas pensarán que educar es normativizar, imponer unos supuestos saberes, hacer que todas nos convirtamos en modelos de personas estandarizadas.
Desde este espacio consideramos que educar es darle cause a la creatividad. Tanto educandas como educadoras están inmersas en un proceso horizontal que les posibilita el mutuo aprendizaje desde la investigación de su creatividad. Aprenden, desaprenden y vuelven a aprender para conformasen como personas conscientes y responsables, ya no solo de su individualidad sino de su colectividad. Porque nos hacemos en la conversación, en el intercambio, en lo comunitario.
En esta medida, el proceso de aprendizaje tiene suma importancia, pues abre el espacio educativo al mundo entero. Aprendemos desde que comenzamos a respirar y no dejamos de respirar en ningún lugar. Pero a la vez que aprendemos, indagamos y opinamos, observamos, y ello nos mueve a crear alternativas, soluciones a los desafíos que se nos presentan a diario. Aprender a desaprender es salir de nuestra zona de comodidad, de la ley establecida, centrarnos en el caos de las posibilidades y dar respuestas alternativas.
APRENDIZAJE COOPERATIVO
“La verdadera dirección del desarrollo del pensamiento no es de lo individual a lo social, sino de lo social a lo individual.”
L.S VygotskY
La cooperación como elemento pedagógico incorporado al aprendizaje no tiene discusión, a lo menos para las que pensamos que la educación es devenir del ser. Abrir la puerta a un mundo que pueda ser construido con nuestras ideas y acciones en interrelación con los otros, permite a los y las participantes en el acto educativo salirse de sus miedos, limites y roles individualistas.
Educar se convierte así en un devenir social que permite a quienes lo ejercen adentrarse con sus cinco sentidos y sus emociones, abandonar las respuestas estereotipadas desde lo individual y construir posibilidades de resolución grupal.
El aprendizaje cooperativo no es solo un medio de comunicación, sino también un modo de comunicarse, y por lo tanto un modo de estar en el mundo. El aprendizaje cooperativo propone asumir principios básicos de responsabilidad individual y grupal, igualdad en la participación, interdependencia positiva e interacción simultanea. El aprendizaje cooperativo nos propone abandonar la posición individualista competitiva y construir una actitud de vida solidaria-participativa.
REVISTA 37 – DICIEMBRE 2017